Cirugía de la nariz donde se busca mejorar el componente estético como también el funcional
Área: Nariz
Candidatos: Aquellas personas que cumpla con las políticas del Dr. Samir Janne Hasbun
El doctor Samir Janne es un Médico Cirujano egresado de la Universidad del Norte en la Ciudad de Barranquilla Colombia. Especialista en cirugía plástica y reconstructiva del instituto Ivo Pitanguy en río de Janeiro , Brazil
La rinoplastia es un procedimiento de cirugía plástica que se centra en la modificación y mejora estética de la nariz. Durante esta cirugía, se pueden realizar diversas modificaciones, como reducir o aumentar el tamaño del puente nasal, cambiar la forma de la punta nasal, corregir desviaciones del tabique nasal o ajustar la simetría nasal. La rinoplastia puede ser tanto estética como funcional, ya que puede mejorar la apariencia facial y al mismo tiempo resolver problemas respiratorios causados por anormalidades nasales. Este procedimiento busca lograr una armonía facial y aumentar la confianza de los pacientes al proporcionar una nariz más estéticamente agradable.
La nariz es una estructura que consta de cartílago y hueso tanto en su estructura externa como en el tabique, estructura interna que separa las dos fosas nasales. El crecimiento de la nariz está sometido al programa genético individual pero se ve modificado por traumas, cicatrices o alteraciones sistémicas como alergias o infecciones tales como la lepra o la leishmaniasis. Su forma externa es muy diferente entre los individuos dado por el biotipo étnico de cada persona haciendo que la etnia asiática o africana tengan una nariz de características muy diferentes a las caucásicas. Dentro del mismo individuo hay asimetrias lo que hace que un orificio nasal sea más redondo o más grande que el otro.
Es importante considerar además que la nariz es el elemento central en la cara. Por esta razón, por un lado, modifica el aspecto de toda la cara pero , por otra, debe esar en armonia con los otros elementos del rostro.Por esta razon se debe estudiar no solo la nariz sino su relación con la región del maxilar asi como la mandíbula incluyendo. el mentón.
Con la rinoplastia se puede adelgazar la punta, rectificar o aumentar el dorso, modificar los ángulos de la nariz en relación a la frente o el labio superior así como rectificar las narinas. Con respecto al tabique, o lámina que separa las dos fosas nasales, se pueden mejorar las irregularidades que transtornas la columna de aire así como tratar los cornetes.
La septorinoplastia usualmente se hace bajo anestesia general pero se puede realizar bajo anestesia local especialmente en cirugia de la punta nasal.Las incisiones pueden ser por dentro de la nariz en la mucosa nasal o en la columnela .A traves de esta se puede modificar la estructura osea y cartilaginosa (hueso y cartílago) del dorso y las estructuras del tabique así como la punta nasal.Si requiere de alguna corrección funcional se realizará a través de las mismas incisiones el tratamiento del tabique nasal y/o los cornetes. La irugía generalmente se realiza con en forma ambulatoria y dura aproximadamente 2-4 horas dependiendo del caso.
Esta cirugía puede combinarse con intervenciones de los maxilares y/o colocación de prótesis de mentón.
Los mejores candidatos para la septorinoplastia o cirugia de la nariz son aquellos que comprenden su biotipo y buscan mejorar su aspecto sin exigir la perfección o alterar su aspecto étnico. Es importante entender que si la piel de la punta nasal es gruesa esta se puede mejorar pero no se puede hacer extremadamente delicada sin lesionara y causar mayores perjuicios.
La evaluación previa a la cirugía plástica nasal implica considerar diversos factores, los cuales pueden variar según las características étnicas del paciente. El cirujano plástico debe examinar detalladamente la proyección de la nariz en el dorso y la punta, identificar posibles desviaciones, evaluar la posición del tabique nasal y verificar la presencia de alteraciones en la columna de aire nasal. Además, se realiza un análisis de la relación proporcional entre la nariz y la cara en términos estéticos.
En muchos casos, se solicita un perfilograma, una radiografía facial que proporciona medidas precisas para evaluar el tamaño y la relación de la nariz con el maxilar superior, la mandíbula y el mentón.
Es crucial que los pacientes reflexionen cuidadosamente sobre sus expectativas antes de someterse a esta cirugía y compartan sus inquietudes con el cirujano plástico. Cada individuo tiene características estructurales y de piel únicas que pueden limitar las modificaciones que se pueden lograr mediante la cirugía. El cirujano plástico orientará al paciente sobre las opciones disponibles, las alternativas posibles, las limitaciones, los riesgos y los cuidados necesarios.
Es fundamental informar al cirujano sobre el uso de medicamentos, así como sobre cualquier enfermedad, trauma facial o cirugía previa que pueda afectar el procedimiento. Si el paciente tiene hipertensión, se puede realizar la cirugía siempre y cuando esté bajo control. Se debe informar sobre problemas de cicatrización, otras condiciones médicas, hábitos como fumar, el consumo de ciertos medicamentos que pueden aumentar el riesgo de sangrado, como aspirina o antiinflamatorios, y cualquier sangrado espontáneo o prolongado.
En preparación para la cirugía, se deben suspender ciertos medicamentos que aumentan el riesgo de sangrado, como aspirina, antiinflamatorios, vitamina E, omega 3 y ginko biloba. Los fumadores deben abstenerse de fumar completamente al menos dos semanas antes de la cirugía para minimizar posibles complicaciones.
El día de la cirugía, se recomienda no aplicar maquillaje y solo tomar los medicamentos indicados por el anestesiólogo. Estas precauciones son esenciales para garantizar un procedimiento seguro y una recuperación óptima.
En la mayoría de los casos, después de la cirugía, es probable que experimente congestión nasal con las fosas tapadas, lo que requerirá respirar por la boca. Durante los primeros cuatro días, es común observar hinchazón facial que disminuirá progresivamente. Es esencial cuidar los vendajes aplicados por el cirujano plástico y evitar mojarlos o manipularlos. Si se presenta un sangrado nasal leve, esto suele ser normal; sin embargo, se recomienda consultar con el cirujano plástico si el sangrado persiste.
Algunos profesionales sugieren la aplicación de solución salina (suero fisiológico) para humedecer los tapones nasales y facilitar su posterior extracción. En caso de estornudos, se aconseja hacerlo con la boca abierta para evitar presionar la nariz. También es importante evitar mojar los vendajes que cubren la nariz.
Se recomienda descansar con la cabeza elevada durante el primer día. Es crucial no tocar la nariz ni intentar quitar los vendajes, ya que esto podría comprometer los resultados de la cirugía. El tiempo de uso de vendajes y/o yeso nasal será determinado por el cirujano plástico. Los tapones nasales generalmente se retiran según las indicaciones del cirujano, típicamente en un período de 1 a 6 días.
Se aconseja no exponerse al sol durante al menos 6 semanas y utilizar protectores solares durante 3 a 6 meses. El retorno a las actividades diarias suele ser posible después de 1 a 2 semanas, aunque se debe evitar realizar actividades físicas intensas durante las primeras 2-3 semanas para prevenir el riesgo de sangrado o traumatismos nasales que puedan afectar los resultados. Los deportes de contacto deben evitarse durante al menos los primeros 3 meses.
Es normal un poco de sangrado pero si el volumen es abundante y persistente, si hay olor fétido en los tapones y si el edema en la cara en lugar de disminuir en la primera semana aumenta debe consultar su cirujano plástico.
En pacientes con antecedentes de convulsiones, existe un posible riesgo de aspiración del taponamiento nasal. Sin embargo, cuando estas condiciones médicas están controladas adecuadamente y la cirugía es realizada por un cirujano plástico cualificado, y el paciente sigue las instrucciones proporcionadas, los riesgos y complicaciones son poco frecuentes y mínimos.
Alrededor del 15% de los casos pueden requerir revisiones para corregir pequeñas imperfecciones, las cuales no se consideran complicaciones significativas. Pueden surgir alteraciones en el proceso de cicatrización de la nariz, dando lugar a irregularidades o hinchazón en ciertas áreas. En casos de corrección del tabique nasal, existe la posibilidad de que el patrón de crecimiento no se modifique por la cirugía y la desviación pueda reaparecer.
Es esencial entender que al buscar información sobre procedimientos específicos de cirugía plástica, cada individuo tiene circunstancias y experiencias únicas, así como respuestas únicas de los tejidos del cuerpo. Si está considerando una cirugía plástica, es recomendable consultar con su cirujano plástico para obtener información más detallada y comprender qué esperar específicamente de ese procedimiento en su caso particular.
La rinoplastia es un procedimiento de cirugía plástica que se centra en la modificación y mejora estética de la nariz. Durante esta cirugía, se pueden realizar diversas modificaciones, como reducir o aumentar el tamaño del puente nasal, cambiar la forma de la punta nasal, corregir desviaciones del tabique nasal o ajustar la simetría nasal. La rinoplastia puede ser tanto estética como funcional, ya que puede mejorar la apariencia facial y al mismo tiempo resolver problemas respiratorios causados por anormalidades nasales. Este procedimiento busca lograr una armonía facial y aumentar la confianza de los pacientes al proporcionar una nariz más estéticamente agradable.
La nariz es una estructura que consta de cartílago y hueso tanto en su estructura externa como en el tabique, estructura interna que separa las dos fosas nasales. El crecimiento de la nariz está sometido al programa genético individual pero se ve modificado por traumas, cicatrices o alteraciones sistémicas como alergias o infecciones tales como la lepra o la leishmaniasis. Su forma externa es muy diferente entre los individuos dado por el biotipo étnico de cada persona haciendo que la etnia asiática o africana tengan una nariz de características muy diferentes a las caucásicas. Dentro del mismo individuo hay asimetrias lo que hace que un orificio nasal sea más redondo o más grande que el otro.
Es importante considerar además que la nariz es el elemento central en la cara. Por esta razón, por un lado, modifica el aspecto de toda la cara pero , por otra, debe esar en armonia con los otros elementos del rostro.Por esta razon se debe estudiar no solo la nariz sino su relación con la región del maxilar asi como la mandíbula incluyendo. el mentón.
Con la rinoplastia se puede adelgazar la punta, rectificar o aumentar el dorso, modificar los ángulos de la nariz en relación a la frente o el labio superior así como rectificar las narinas. Con respecto al tabique, o lámina que separa las dos fosas nasales, se pueden mejorar las irregularidades que transtornas la columna de aire así como tratar los cornetes.
La septorinoplastia usualmente se hace bajo anestesia general pero se puede realizar bajo anestesia local especialmente en cirugia de la punta nasal.Las incisiones pueden ser por dentro de la nariz en la mucosa nasal o en la columnela .A traves de esta se puede modificar la estructura osea y cartilaginosa (hueso y cartílago) del dorso y las estructuras del tabique así como la punta nasal.Si requiere de alguna corrección funcional se realizará a través de las mismas incisiones el tratamiento del tabique nasal y/o los cornetes. La irugía generalmente se realiza con en forma ambulatoria y dura aproximadamente 2-4 horas dependiendo del caso.
Esta cirugía puede combinarse con intervenciones de los maxilares y/o colocación de prótesis de mentón.
Los mejores candidatos para la septorinoplastia o cirugia de la nariz son aquellos que comprenden su biotipo y buscan mejorar su aspecto sin exigir la perfección o alterar su aspecto étnico. Es importante entender que si la piel de la punta nasal es gruesa esta se puede mejorar pero no se puede hacer extremadamente delicada sin lesionara y causar mayores perjuicios.
La evaluación previa a la cirugía plástica nasal implica considerar diversos factores, los cuales pueden variar según las características étnicas del paciente. El cirujano plástico debe examinar detalladamente la proyección de la nariz en el dorso y la punta, identificar posibles desviaciones, evaluar la posición del tabique nasal y verificar la presencia de alteraciones en la columna de aire nasal. Además, se realiza un análisis de la relación proporcional entre la nariz y la cara en términos estéticos.
En muchos casos, se solicita un perfilograma, una radiografía facial que proporciona medidas precisas para evaluar el tamaño y la relación de la nariz con el maxilar superior, la mandíbula y el mentón.
Es crucial que los pacientes reflexionen cuidadosamente sobre sus expectativas antes de someterse a esta cirugía y compartan sus inquietudes con el cirujano plástico. Cada individuo tiene características estructurales y de piel únicas que pueden limitar las modificaciones que se pueden lograr mediante la cirugía. El cirujano plástico orientará al paciente sobre las opciones disponibles, las alternativas posibles, las limitaciones, los riesgos y los cuidados necesarios.
Es fundamental informar al cirujano sobre el uso de medicamentos, así como sobre cualquier enfermedad, trauma facial o cirugía previa que pueda afectar el procedimiento. Si el paciente tiene hipertensión, se puede realizar la cirugía siempre y cuando esté bajo control. Se debe informar sobre problemas de cicatrización, otras condiciones médicas, hábitos como fumar, el consumo de ciertos medicamentos que pueden aumentar el riesgo de sangrado, como aspirina o antiinflamatorios, y cualquier sangrado espontáneo o prolongado.
En preparación para la cirugía, se deben suspender ciertos medicamentos que aumentan el riesgo de sangrado, como aspirina, antiinflamatorios, vitamina E, omega 3 y ginko biloba. Los fumadores deben abstenerse de fumar completamente al menos dos semanas antes de la cirugía para minimizar posibles complicaciones.
El día de la cirugía, se recomienda no aplicar maquillaje y solo tomar los medicamentos indicados por el anestesiólogo. Estas precauciones son esenciales para garantizar un procedimiento seguro y una recuperación óptima.
En la mayoría de los casos, después de la cirugía, es probable que experimente congestión nasal con las fosas tapadas, lo que requerirá respirar por la boca. Durante los primeros cuatro días, es común observar hinchazón facial que disminuirá progresivamente. Es esencial cuidar los vendajes aplicados por el cirujano plástico y evitar mojarlos o manipularlos. Si se presenta un sangrado nasal leve, esto suele ser normal; sin embargo, se recomienda consultar con el cirujano plástico si el sangrado persiste.
Algunos profesionales sugieren la aplicación de solución salina (suero fisiológico) para humedecer los tapones nasales y facilitar su posterior extracción. En caso de estornudos, se aconseja hacerlo con la boca abierta para evitar presionar la nariz. También es importante evitar mojar los vendajes que cubren la nariz.
Se recomienda descansar con la cabeza elevada durante el primer día. Es crucial no tocar la nariz ni intentar quitar los vendajes, ya que esto podría comprometer los resultados de la cirugía. El tiempo de uso de vendajes y/o yeso nasal será determinado por el cirujano plástico. Los tapones nasales generalmente se retiran según las indicaciones del cirujano, típicamente en un período de 1 a 6 días.
Se aconseja no exponerse al sol durante al menos 6 semanas y utilizar protectores solares durante 3 a 6 meses. El retorno a las actividades diarias suele ser posible después de 1 a 2 semanas, aunque se debe evitar realizar actividades físicas intensas durante las primeras 2-3 semanas para prevenir el riesgo de sangrado o traumatismos nasales que puedan afectar los resultados. Los deportes de contacto deben evitarse durante al menos los primeros 3 meses.
Es normal un poco de sangrado pero si el volumen es abundante y persistente, si hay olor fétido en los tapones y si el edema en la cara en lugar de disminuir en la primera semana aumenta debe consultar su cirujano plástico.
En pacientes con antecedentes de convulsiones, existe un posible riesgo de aspiración del taponamiento nasal. Sin embargo, cuando estas condiciones médicas están controladas adecuadamente y la cirugía es realizada por un cirujano plástico cualificado, y el paciente sigue las instrucciones proporcionadas, los riesgos y complicaciones son poco frecuentes y mínimos.
Alrededor del 15% de los casos pueden requerir revisiones para corregir pequeñas imperfecciones, las cuales no se consideran complicaciones significativas. Pueden surgir alteraciones en el proceso de cicatrización de la nariz, dando lugar a irregularidades o hinchazón en ciertas áreas. En casos de corrección del tabique nasal, existe la posibilidad de que el patrón de crecimiento no se modifique por la cirugía y la desviación pueda reaparecer.
Es esencial entender que al buscar información sobre procedimientos específicos de cirugía plástica, cada individuo tiene circunstancias y experiencias únicas, así como respuestas únicas de los tejidos del cuerpo. Si está considerando una cirugía plástica, es recomendable consultar con su cirujano plástico para obtener información más detallada y comprender qué esperar específicamente de ese procedimiento en su caso particular.
Se recomiendan al menos 2 semanas de estancia en Barranquilla contando a partir del día de la cirugía.
Se pueden corregir problemas funcionales al momento de una rinoplastia estética. De hecho mas allá de que la nariz quede estéticamente mejor la prioridad es que esta funcione bien motivo por el cual casi siempre trabajamos la parte funcional en conjunto.
Los resultados de una rinoplastia se ven al cabo de aproximadamente 8 meses a un año después de la cirugía
Los cuidados después de una rinoplastia usualmente son dormir boca arriba, tomar la medicación y evitar esfuerzos físicos. También se deben aplicar unos medicamentos en forma de spray e ir a los controles con el Dr Samir entre otros cuidados.